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bata blanca, dilatación, escritora, escritura, gachas, ginecólogo, hijas, hijos, hospital, Laura, Laura Diaz, Laura Diaz Rodriguez, Literatura, madre, Matrona, médico, niñas, niños, novela, Parto, post parto, relato, sala de partos, sala nido, tocólogo
En mi habitación del hospital sonaba la voz de Lara, mi madre, que con tanto esmero recordaba en voz alta…
Quisieron adoptar a Eloísa. Era tan rica, tan madurita ya con nueve años, tan graciosa, que un matrimonio bien, sin hijos, amigos de su señora, fueron a hablar con Carlota; la niña quería porque eran muy buenos y le darían todos los días de comer, su abuela estaba casi convencida. “La niña tendrá mejores oportunidades”, pero, ¡claro!, hubo una condición inaceptable, la abuela y la nieta no podrían verse, ni besarse, ni abrazarse… ambas famélicas de su cariño; lejanía e incertidumbre. Sigue leyendo